CUENTOS DE BRUJITA: DESCARADA Y EL SOLSTICIO DE VERANO IV

La Brujita Descarada desvió ahora su atención hacia un nutrido grupo que se estaba concentrando en un extremo de la explanada. Eran los concursantes que, como ella, iban a conocer su orden de actuación. Se dirigió hacia ellos, sin prestarle atención a la Bruja Lola, que quería presentarle a un Mago muy guapo que había venido de un bosque vecino para los Juegos del Solsticio. La dejó coqueteando y se dispuso a enterarse de todos los pormenores del concurso.

Había allí algunos Magos y Brujas que no conocía. Supuso que habrían venido de otros bosques, atraídos por el prestigio del concurso. Se entretuvo un poco en observarlos, intentando adivinar qué clase de magia ejecutaría cada uno de ellos. ¿Quién de todos ellos, sería capaz de ganar el concurso? Brujita sabía que las apariencias engañan y ¡ más aún tratándose de Magos y Brujas! 

-         ¡Hola! Creo que no te conozco...

-            ¿Qué?- dijo Brujita sobresaltada. - ¡Lo siento! Estaba distraída y no me había dado cuenta de que me hablabas. ¿Qué decías?

                  -         Que creo que no te conozco. No eres de este bosque, ¡a que no!

                  -         No. Pero conozco a todos los que viven en él, y a ti no te había visto nunca.

                  -         ¡Oh, claro! Es que vivo un poco apartado, en el extremo sur.

“¡Qué raro!, penso Brujita, nunca nadie me había hablado de este Mago. Le preguntaré a la Bruja Lola. ¡Seguro que ella le conoce!”

-            ¡Pues qué bien!, continuó la Brujita Descarada. ¿Y por qué vives tan lejos de los demás? Por cierto, soy la Brujita Descarada. ¿Cuál es tu nombre?

   -            Soy el Mago Altherius, y la razón de que viva tan apartado es porque no me gusta el bullicio. Me molesta tanta actividad. No me deja concentrarme en mi magia.

                   -         Pero, ¡has venido a la Fiesta del Solsticio de Verano!- apuntó Brujita.

   -              ¡Sí, claro! El concurso del Mejor Fuego Artificial del Solsticio de Verano, es una de mis aficiones favoritas. Este año, incluso voy a concursar. Tú también, supongo, o no estarías aquí. ¿Me equivoco? – Y miraba a Brujita fijamente, cerrando sus pequeños ojillos negros.

* SIEMPRE UNO