LA HISTORIA DE DIDO

En fuentes griegas y romanas, Dido o Elisa de Tiro aparece como la fundadora y primera reina de Cartago, en el actual Túnez. Es conocida principalmente por el relato incluido en la Eneida del poeta romano Virgilio. 

Era hija del rey de Tiro, Belo, también conocido como Muto.
Dido tenía dos hermanos: Pigmalión, que heredó el trono de Tiro y la pequeña Ana.
Siqueo o Sicarbas, sacerdote del templo de Melkart en Tiro (divinidad relacionada con Hércules) tenía muchos tesoros escondidos. Pigmalión los codiciaba y para saber su paradero obligó a su hermana Elisa a casarse con Siqueo.
Pero Pigmalión no contó a Elisa el interés que él tenía en ese matrimonio. Elisa no amaba a Siqueo pero éste a ella sí. 
Un tiempo después, Pigmalión le comentó a su hermana la conveniencia de saber dónde se escondían los tesoros de Siqueo. Viéndose utilizada, Elisa averiguó dónde estaban escondidos pero no le dijo la verdad a su hermano.

Los tesoros estaban enterrados en el jardín del templo y Elisa le dijo a Pigmalión que estaban escondidos debajo del altar.
Esa misma noche, Pigmalión mandó unos sicarios a matar a Siqueo. Tras eso, los esbirros hicieron una fosa bajo el altar buscando inútilmente el tesoro.
Elisa vio a su marido asesinado y corrió a desenterrar el tesoro del jardín. Con él en su poder, huyó de Tiro llevándose a su hermana Ana y un séquito de doncellas, ayudada por amigos de Siqueo.
La huída de Eneas y el destino de Dido

Elisa llegó a las costas de África, donde vivían los gétulos o getulos, una tribu de libios cuyo rey era Jarbas. Pidió hospitalidad y un trozo de tierra para instalarse en ella con su séquito. 
Jarbas le dijo que le daba tanta tierra como pudiera ser abarcada por una piel de buey. Elisa, para que la piel abarcara la máxima tierra posible hizo cortar la piel a finas tiras y así consiguió un extenso trozo de tierra.
Tras esto, hizo construir una fortaleza llamada Birsa, que más tarde se convirtió en la ciudad de Cartago o Qart-Hadašh, que en fenicio significaba "Ciudad Nueva", sobre un promontorio existente entre el lago de Túnez y la laguna Sebkah er-Riana, por ende mar abierto. Recibió de los indígenas el nombre de Dido.

Hay dos versiones acerca de la muerte de Dido:
En la versión clásica, Jarbas se quiere casar con ella, pero Dido es todavía fiel al recuerdo de Siqueo. Cree que si rechaza a Jarbas éste tomará represalias contra ella y su gente.
Así, el día de la boda, antes de celebrarla, Dido se hunde un puñal en el pecho. Éste sería el modelo de los sacrificios que los cartagineses ofrecerían en el tofet.
Por esto la muerte de Dido se relaciona con la figura mitológica del Fénix, que muere en el fuego para renacer de sus cenizas.
La segunda es la que aparece en la Eneida de Virgilio. Eneas llega a Cartago. Dido le ama enseguida y Eneas la corresponde. Pasan un tiempo juntos, pero Eneas, que ha recibido de Júpiter la misión de fundar un nuevo pueblo, debe partir a su destino. Una noche,
Eneas embarca con su gente y Dido corre a convencerle de que se quede con ella, pero no lo consigue.

Le ve partir y ordena levantar una gigantesca pira donde manda quemar la espada, algunas ropas que Eneas había dejado en palacio y el tronco del árbol de la entrada de la cueva donde se amaron por primera vez.
Al amanecer subió a la pira y se hundió en el pecho la espada de Eneas.
Tras su muerte, su hermana Ana, que había intentado disuadir del suicidio a Dido, ordena prender la pira funeraria.

Sobre esta segunda versión, el poeta Ovidio dedicó una epístola en sus célebres Heroidas, la VII (carta de Dido a Eneas), donde la fundadora de Cartago manifiesta su intención de suicidarse ante la partida o traición de Eneas.
Tras su muerte fue venerada como una diosa.
Dido y Eneas.
Cuando los troyanos llegan enviados por la tempestad desatada de Juno a Cartago, los recibe su reina, Dido. Eneas le pide ayuda a Dido y Venus –madre de Eneas- para que ésta no lo traicione envía que Cupido la enamore de Eneas.

Dido había prometido nunca olvidarse de su marido muerto por su hermano, Siqueo. Sin embargo, con ayuda de su hermana Ana y la intervención de Cupido logra abrirse al amor de Eneas.
Venus pacta con Juno que harán que Dido y Eneas se casen, para que juntos reinen Cartago. Venus sabía que ese no era el destino de Eneas pero finge aceptar el trato.
Juno organiza una cacería donde desata una tormenta que obliga a Dido y a Eneas a dormir bajo el mismo techo donde Juno los casa. Mercurio le comunica a Eneas que ese no es su destino, que debe partir hacia Italia.

Entonces, Eneas hace caso y abandona a Dido. Dido intenta olvidarlo, con ayuda de su hermana pero no puede. 
Cartago 

En el capítulo VI de la Eneida, cuando Eneas desciende con ayuda de Sybilla de Cumas al infierno, la encuentra entre los muertos por amor y le explica que él no quería abandonarla, que los dioses habían labrado así su destino.
Fuente: http://imagina65.blogspot.com/2010/05/la-zona-historica-dido-la-reina.html


1 comentario:

  1. Interesante historia, si señora. Pero ¿cual de las dos versiones será la cierta? es algo que siempre quedará en el misterio...

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